"Síndrome de Estocolmo": un vínculo inesperado entre víctimas y secuestradores
Por 2 Julio, 2025La mañana del 23 de agosto de 1973, Kristin Ehnmark, de 26 años, comenzó su jornada como cajera en el banco Kreditbanken, en la plaza Norrmalmstorg, en el centro de Estocolmo. Ese día, sin embargo, un intento de robo a mano armada transformó su vida y la de otros tres compañeros, dando origen a lo que más tarde se conocería como el Síndrome de Estocolmo.
Un plan fallido que terminó en secuestro
El atacante, Jan Erik Olsson, de 32 años, entró al banco con una ametralladora y disparó al aire, ordenando a todos tirarse al suelo. Su objetivo era robar dinero y escapar, pero la intervención inmediata de la policía frustró sus planes. En un acto desesperado, tomó a cuatro empleados como rehenes, incluyendo a Kristin, y exigió tres cosas:
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Una suma de dinero como rescate
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Un automóvil para huir
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La liberación de su ex compañero de celda, Clark Olofsson
Seis días de tensión y un vínculo inesperado
El encierro duró seis días, durante los cuales ocurrió lo inesperado: los rehenes comenzaron a empatizar con sus captores. Kristin incluso habló por teléfono con el entonces primer ministro Olof Palme, pidiendo que atendiera las demandas de los secuestradores. Durante la llamada, expresó que confiaba más en ellos que en la policía, y los describió como “amables”.
La situación desconcertó a las autoridades, especialmente cuando los rehenes justificaban el comportamiento de los delincuentes y, en momentos críticos, restaban importancia a las amenazas.
El desenlace del robo de Norrmalmstorg
El caso, conocido como el robo de Norrmalmstorg, fue el primer crimen transmitido en vivo en la televisión sueca. El operativo culminó con el uso de gas lacrimógeno, forzando la rendición de los secuestradores sin heridos graves.
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Jan Erik Olsson fue condenado a 10 años de prisión.
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Clark Olofsson fue absuelto, al considerarse que su participación fue forzada.
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Los rehenes fueron liberados físicamente ilesos, pero con secuelas psicológicas.
Kristin necesitó más de una década para procesar lo vivido. En retrospectiva, describió sus emociones como una mezcla de miedo, confusión y empatía mal dirigida.
El nacimiento del término “Síndrome de Estocolmo”
A raíz del caso, el psiquiatra Frank Ochberg acuñó el término Síndrome de Estocolmo, describiéndolo como una respuesta emocional de supervivencia en la que la víctima desarrolla un vínculo con su agresor. Según Ochberg, este fenómeno es una forma del cerebro humano de adaptarse a situaciones de peligro extremo.
Un legado que persiste medio siglo después
El caso ha sido ampliamente estudiado y retratado en medios internacionales. La miniserie de Netflix ‘Clark’ revivió el interés por Clark Olofsson, quien acumuló delitos a lo largo de su vida y falleció recientemente a los 78 años.
Hoy, a 50 años del suceso, el robo de Norrmalmstorg sigue siendo referencia en estudios de criminología y psicología, demostrando la complejidad del comportamiento humano ante el miedo y el encierro.
Kristin Ehnmark, ahora en sus setenta, reflexiona sobre aquellos días con asombro. Reconoce que, aunque fue un trauma, también fue una ventana a la mente humana y su capacidad de adaptación.
Con información de La Nación
*ARD