Misoginia azul
Por 16 Agosto, 2021La decisión política del Comité Ejecutivo Nacional del PAN de que, en 14 estados, de los 28 que renovarán dirigencias estatales este año sean para mujeres, entre ellos Puebla, está generando una controversia innecesaria en un partido que históricamente ha contado con ellas, que han hecho aportaciones, pero no siempre las han dejado mandar, como se espera en este caso.
Ayer, poblanas legisladoras, regidoras en funciones y electas, consejeras nacionales y estatales de Acción Nacional se presentaron a dar la cara, mujeres al fin, y le dieron la voz a la diputada reelecta Mónica Rodríguez Della Vecchia, apelando a la memoria de la primera gobernadora poblana, Martha Erika Alonso, para respetar la determinación del CEN sobre la “paridad” en la renovación de la dirigencia estatal azul y evitar caer en convertirse en un “partido misógino”.
Puebla está dentro de los 14 estados de la República donde a partir del nuevo periodo seguirá encabezado por una mujer, a la fecha, de las 32 entidades federativas solo 7, incluida la entidad tiene a una mujer al frente.
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Della Vecchia destacó que la medida tomada por la dirigencia nacional de su partido es considerada como “histórica”, como en su momento fue lo que se logró con Martha Erika Alonso como gobernadora de Puebla, y quien siempre lucho por la paridad.
Agregó “celebrados este paso histórico y desde Puebla le decimos a Marko Cortés que tiene nuestro respaldo”.
La diputada federal Verónica Sobrado, y la diputada federal electa por el Distrito 11 de Puebla, Carolina Beauregard Martínez, llamaron a los panistas a no dividirse, y respetar que “hoy es tiempo de las mujeres”
“Queremos que el panismo poblano sea sensible para la gente. La ciudadanía no quiere un PAN dividido, sino fuerte, el enemigo está afuera con Morena, la ciudadanía no quiere un partido misógino. De aquí surgió la primera gobernadora, Martha Erika Alonso, quien siempre estuvo preocupada y ocupada de todas las mujeres panistas. Mas allá de confrontaciones, es momento de unirnos, los ciudadanos no quieren pleitos internos en los partidos”, citaron.
Entre las panistas que hicieron este llamado figuraron, la diputada Lupita Leal, Aurora Sierra, entre otras, quienes aclararon que las fórmulas serán “igualitarias”, por lo que no hay que caer en incongruencias.
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Si a algunos panistas les molesta la posibilidad de la relección de la actual dirigente estatal, Genoveva Huerta, tienen la oportunidad de presentar una propuesta de mujer y actuar democráticamente en consecuencia.
Eso de querer imponer a un hombre, hay nombres y apellidos, a estas alturas no se escucha más que pataleos misóginos que quedarán en berrinche, porque la política de paridad impulsada por el Comité Nacional panista no tiene marcha atrás.
La próxima dirigente panista en Puebla será mujer.
De las anécdotas que se cuentan
La mañana del pasado viernes 13 de agosto, el presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó su ceremonia por “los 500 años de resistencia indígena México-Tenochtitlan” frente a una pirámide de cartón. Con su conocimiento anecdótico de las cosas, pidió perdón por la “catástrofe provocada por la conquista española al conmemorar los 500 años de la toma de Tenochtitlán por las tropas de Hernán Cortés”.
“Recordamos la caída de la gran Tenochtitlán y ofrecemos perdón a las víctimas de la catástrofe originada por la ocupación militar española de Mesoamérica y del resto del territorio de la actual República Mexicana”, dijo en su discurso.
Luego se enredó en una de sus discusiones que nadie le pidió y no dudó en señalar que los mexicas no eran antropófagos.
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Y para que concluyera su alegato citó a Fernando Benítez, “Entre las llamas que achicharraban a los herejes y los sacrificios aztecas hay pocas diferencias”.
Hasta ahí, su mensaje predecible; sin embargo, soltó una frase que registraron de inmediato los expertos en seguridad. “No se debe justificar las matanzas realizadas por los conquistadores. No hay justificación alguna para tanta matanza”.
La afirmación fue interpretada de inmediato como una confirmación más a Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad Ciudadana federal, la seguirá ocupando en la coordinación de vacunas contra el COVID-19 en el norte del país y nadie sabe cómo cumplirá los acuerdos que la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, le ha puesto al presidente sobre la mesa.
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Es un enigma cómo le hará el presidente mexicano para frenar de golpe el tránsito de fentanilo a Estados Unidos, con su discurso de amor y paz, frente a maquinarias de los cárteles que, por ejemplo, están devastando a la Tierra Caliente michoacana.
Mientras tanto, frente a las llamas del país, López Obrador seguirá con sus cajas chinas, ahora pidiéndole perdón a los conquistados.
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Con información de Lo de Hoy Noticias
*AR