Jubilación y depresión: los peligros del alcohol durante la vejez
Por 29 Enero, 2025Un reciente estudio realizado por expertos de la Universidad Mayor de Santiago de Chile y la Universidad Simmons de Boston, Estados Unidos, ha explorado la relación entre la jubilación, la depresión y el consumo de alcohol. Los resultados sugieren que las personas jubiladas presentan más síntomas depresivos que aquellas que continúan trabajando, y esta situación empeora si consumen alcohol en exceso.
Publicado en la revista Aging and Mental Health, el estudio ha seguido a más de 27.500 hombres y mujeres mayores de 50 años en Estados Unidos durante un período de 14 años. Los participantes, entre los cuales había jubilados, personas con jubilación parcial y trabajadores activos, completaron un cuestionario cada dos años sobre diversos aspectos de su vida, incluyendo su salud mental y hábitos de consumo.
La depresión en los jubilados
Para medir la depresión, se incluyeron preguntas como si los participantes se habían sentido tristes en la última semana o si las tareas cotidianas les parecían especialmente difíciles. Los resultados mostraron que los jubilados presentaban, en promedio, 0,04 más síntomas de depresión que los trabajadores activos.
El impacto del alcohol en la depresión
En cuanto al consumo de alcohol, se observó que aquellos jubilados que bebían en exceso, es decir, cuatro o más bebidas diarias en el caso de las mujeres y cinco o más para los hombres, tenían 0,07 más síntomas de depresión en comparación con los que no bebían. Sin embargo, aquellos que consumían alcohol con moderación (una a tres bebidas diarias en mujeres y una a cuatro en hombres) mostraron 0,09 menos síntomas que los abstemios. Este resultado ha sido vinculado con la capacidad del alcohol para mejorar el estado de ánimo, especialmente a través de la socialización.
Advertencia sobre el consumo de alcohol
A pesar de los beneficios que la socialización y el consumo moderado pueden aportar, los investigadores subrayan que no están promoviendo el consumo regular de alcohol como forma de adaptación a la jubilación. Antonia Díaz-Valdés, experta de la Universidad Mayor, destacó que "beber alcohol aumenta el riesgo de caídas y otras lesiones y puede llevar a la dependencia, lo que acarrea una mala salud".
Recomendaciones para las autoridades
Ante estos hallazgos, los expertos instan a las autoridades políticas a implementar mecanismos de apoyo para las personas en su transición hacia la jubilación, para evitar que recurran al consumo excesivo de alcohol y ayudarles a adaptarse de forma más saludable al cambio. Díaz-Valdés concluyó: "No hay duda de que adaptarse a la jubilación puede ser difícil para algunas personas, pero recurrir al alcohol no es la respuesta. Debemos encontrar y ofrecer alternativas más saludables".
Con información de El País
*ARD