¿Cómo identificar si tu hijo sufre depresión?

La pandemia por la Covid-19 no solo impactó nuestra salud, sino nuestras vidas, sin embargo, los más afectados fueron los niños, ya que las escuelas que eran vitales para su desarrollo cerraron, por lo que tuvieron que optar por hábitos diferentes y un encierro.

Por lo que, de acuerdo con un estudio de la Universidad Calgary de Canadá, los síntomas de la depresión se duplicaron en comparación a los niveles que existían antes de la pandemia por la Covid-19.

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Pues la falta de comunicación con sus amigos, el encierro diario y convivir con sus padres todo el tiempo causó que algunos niños se sintieron irritados, porque no contaban con un espacio para sí mismos, por lo que es importante estar alerta y no confundir los síntomas con algunas conductas “normales”.

Aunado a lo anterior, se debe tener una buena comunicación con su hijo o hija, además, de llevarlos con un experto para abordar qué puede estar agobiando al menor y por qué actúa de cierta forma constantemente.

Señas de que un niño sufre depresión:

• Irritados: Normalmente están de mal humor, a veces tienen ataques donde suelen explotar sin razón, además, causan problemas de la nada o actúan indiferentes, por lo que es importante hablar con ellos, ya que puede deberse a depresión que a veces se confunde con la etapa de la rebeldía.
• Aislamiento: El niño con depresión tiende a aislarse, se encierra en su cuarto por mucho tiempo, no convive con más niños, baja su rendimiento escolar, se mantiene callado cuando le preguntan qué pasa y se ausenta en la escuela o se niega a ir a clases. Cabe resaltar que el aislamiento puede ser causado por bullying o acoso, por lo que debes monitorear su actividad en Internet y las redes sociales, para descartar cualquier problema que lo afecte emocionalmente.

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• Falta de sueño y atención: Los niños presentan problemas para concentrarse en la escuela o en su entorno, se aburren constantemente y están irritables, ya que padecen de energía o cansancio sin razón, lo cual puede deberse a sus hábitos de sueño y alimentación han empeorado.

*ARD