Guzmán y Muñoz: ejecución de Estado

Guzmán y Muñoz: ejecución de Estado

Del Reportero
Por Fernando A. Crisanto 29 Mayo, 2025

La frase de Harfuch. “El crimen organizado opera desde el Estado”, es la frase que la voz del video señala que Omar García Harfuch pronunció tras una avalancha de datos que ya había recabado, un día después de la ejecución a Ximena Guzmán y José Muñoz.

El video apareció el 23 de mayo, tiene poco más de 100 mil reproducciones, muchas para ser de un grupo desconocido. La tapadera del autor se llama “Batallas y Operaciones”. No llega a diez videos publicados. El que nos ocupa se titula “El crimen digital que silenció a Jimena Guzmán y a José Muñoz”. Dura 18:23 minutos.

A ratos, “Batallas y Operaciones” apoya a la 4T y a ratos, se va por la libre. Analizando, podría pensarse que desde alguna oficina federal sueltan alguna idea, algún plot y el propagandista se aplica a fondo para hacerlo, a toda velocidad.

“El crimen digital que silenció a Jimena Guzmán y a José Muñoz”, señala los siguientes elementos, que permiten entender de qué va la historia.
Los presento entrecomillados, en el entendido que una vez vaciada la voz en un archivo de texto, dieron 25 páginas.

Las frases. “Las cámaras del C5 ojos omnipresentes de la ciudad habían sido apagadas minutos antes (del atentado contra Guzmán y Muñoz)”.
“Los atacantes huyeron en rutas sincronizadas, ejecutando movimientos que no parecían improvisación, sino la lectura exacta de un libreto escrito con manos invisibles”.

“Omar García Harfuch (…) sabía que esto no era una ejecución común: era una operación de inteligencia interna disfrazada de crimen callejero”.

“Un hallazgo cambió todo. Un técnico forense, inspeccionando el vehículo, encontró una memoria USB escondida dentro del respaldo trasero derecho. No tenía etiquetas, no tenía huellas, solo un nombre codificado en su interior: Altamira 7. Ese mismo nombre había sido reportado dos años antes, vinculado a una finca abandonada en Milpa Alta señalada por el SAT como centro clandestino de Manipulación Electoral”.

“La USB fue enviada al Centro Nacional de Fusión de Inteligencia Cibernética, CNFIC (…)

14 transferencias bancarias entre el 1 y el 17 de mayo con montos que iban de 30 mil a 300 mil pesos”.

“Procedencia: lavanderías fantasmas en Iztacalco, Benito Juárez y Tláhuac. Destino intermedio: una empresa de seguridad llamada Grupo Escudo 21, registrada a nombre de un exigente expulsado de la SCC. Destino final: una cuenta personal de un juez federal en Iztapalapa, el mismo juez que había ordenado el cierre de tres investigaciones sensibles contra políticos vinculados al crimen organizado”.

“(Se encontró) en un subdirectorio oculto, el nombre Punto rojo, un documento de 47 líneas, un croquis de la cámara 2167 con su temporizador programado para apagarse a las 8:11 am. Una ventana táctica de 3 minutos y 50 segundos, un diagrama oficial de una aseguradora privada detallando cómo los protocolos de SEMOVI y SSC no coinciden durante el cambio de turno en la vigilancia urbana”.

“El equipo especial Hidra descubrió algo que no debía existir: imágenes que no aparecían en los registros automáticos A las 7:46 tres sujetos con camisas grises y chalecos del SSC entraron al cuarto de control, manipularon los sistemas por 5 minutos y desaparecieron sin dejar rastro administrativo”.

“Harfuch pidió los nombres de estos hombres: La respuesta fue: no existen en la nómina. Nunca fueron contratados. No hay tarjetas de acceso. No hay registros”.

“Al cruzar los rostros con bases biométricas de eventos gubernamentales el software arrojó una coincidencia: uno de los infiltrados había trabajado como personal de refuerzo durante un evento del PRI en el Palacio de los Deportes en 2023. Una sombra que se mueve entre actos públicos y operaciones clandestinas”.

“El 21 de mayo, Omar García Harfuch (llegó) a Lago Playa 231 en Benito Juárez, fachada en ruinas, Cartel de ‛Papelería Lupita’ descolorido por el sol. Tras esa cortina de polvo y silencio, un cuarto frío insonorizado tenía en el centro un servidor encendido sin pantalla sin teclado. Cuando el equipo técnico de la Unidad Hidra lo desconectó, el sistema intentó suicidarse con el Protocolo de auto limpieza”.

“En el caché temporal quedó un fragmento de un archivo sin cifrar llamado operadorcer.com Era un archivo de configuración, pero no cualquiera. Cuatro alias definidos como factores de alteración estructural, capaces de alterar nodos de vigilancia digital sin dejar huella”.

“Uno de esos nombres estaba marcado con rojo codificado simplemente como AL acceso nivel 7 proyecto SMJ. Cuando los analistas cruzaron esa clave con los registros históricos del Centro Nacional de Inteligencia, AL correspondía a un ex asesor en tecnología del exgobernador de Jalisco arquitecto del sistema estatal de videovigilancia, y consultor en el desarrollo del software de reconocimiento facial Syntax 5”.

“Desaparecido en 2023, según se dijo por retiro voluntario, como revelaron los archivos filtrados había sido modificado para incluir puertas traseras, accesos secretos, ventanas invisibles, rutas diseñadas para burlar la seguridad legítima del Estado”.

“Justo 3 minutos antes del asesinato de Jimena Guzmán y José Muñoz, un acceso no autorizado fue registrado en el nodo de vigilancia 14 ubicado en Calzada de Tlalpan y Napoleón. Nadie se percató. nadie lo bloqueó, no generó alertas, no fue casualidad. Las direcciones IP utilizadas estaban enmascaradas: Rumanía, Singapur, Hermosillo, Oslo, Ciudad de México. Y la última ubicación un nodo clandestino que no figuraba en el registro de ninguna dependencia, Lago Playa 231”.

“Cincuenta segundos antes del disparo, una cámara auxiliar no oficial instalada sobre una tienda de pintura captó lo que el C5 nunca mostró. Un hombre de traje oscuro gafas polarizadas de pie junto a una parada de autobús realiza un gesto que parece anodino, pero no lo es: se ajusta el puño tres veces, un movimiento limpio, preciso, una señal. El análisis cinemático reveló que ese gesto coincidía exacto al segundo con la aparición de la motocicleta asesina. Era el código de activación, un gesto cotidiano”.

“Harfuch ordenó entonces una reconstrucción forense completa de los 15 días previos; no solo de las rutas de Jimena y José, sino de cada acceso digital, cada cámara alterada, cada conexión de protocolo manipulada. El patrón comenzaba a emerger: una secuencia de 12 accesos irregulares al C5”.

Lo identificable. El reportero consultó con un experto en inteligencia y éste señala que, no existen personas que se llamen tal cual se mencionan en el video; no existe en la Alcaldía Benito Juárez dicha dirección; la razón social mencionada de la empresa de seguridad no existe y el arma empleada en la ejecución de Guzmán y Muñoz era de un calibre distinto al que mencionan en la narración, entre muchos otros detalles que no son precisos.

Puede pensarse entonces que los datos empleados para el video son ficción, pero de ninguna manera eso desvirtúa hacia dónde apunta el autor del guion: 
1.-La especie de que no funcionaba debidamente la cámara de videovigilancia del C5 en aquella zona de Calzada de Tlalpan, sigue vigente.

2.-El que tras la llegada de Andrés Manuel López Obrador dejó fuera del CISEN a un sinnúmero de expertos en áreas de contrainteligencia, es un hecho. Y esos expertos se han reinventado para dedicarse a lo mismo o buscar otras ocupaciones.

3.-La idea central de que pueden apagarse y encenderse las cámaras de vigilancia del C5 tiene sustento y el que podría haber homicidios planeados y ejecutados, disfrazados de ejecuciones, en todo el país, no es un tema menor.

4.-El mensaje que se envía con este video propagandístico, es que hay alguien que no cree que Guzmán y Muñoz fueron ejecutados por algo menor a una operación sofisticada y hecha con la participación de docenas de personas entrenadas.

5.-Si fuera cierto lo que se menciona en el video, Harfuch no estaría diciendo que los asesinos son del PRI, el PAN o Morena: más bien estaría señalando que hay un grupo de contrainteligencia que ha cometido homicidios selectivos y usa recursos del más alto nivel.

Ese grupo no sería de los cárteles o de políticos vinculados a la mafia: más bien, se trataría de una mixtura que está enviando mensajes sobre lo que ha perdido y lo que quiere recuperar.

Más allá de la pieza propagandística y de la creatividad de sus autores, la hipótesis ahí queda y sugiere que hay un mundo de sombras que viven tras un poder, claramente podrido.

fcrisanto00@yahoo.com.mx
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Facebook: Fernando Crisanto

 

*ARD

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