¿Habrá Primor?

Con su iniciativa de Reforma Eléctrica, el presidente Andrés Manuel López Obrador alteró las pasiones políticas, a tal grado que su decisión de coquetear con los legisladores priistas propició movimientos que pueden trascender hasta 2024 y afectar el desarrollo de las sucesiones estatales.

Con sus mañaneras y sus ultimátum a los legisladores para definirse a favor de su propuesta, puso en duda el futuro de la alianza PAN-PRI-PRD conocida como Alianza por México y aquí Alianza por Puebla.

Alejandro Moreno, dirigente nacional priista, aseguró el martes que a ellos nadie los presiona y el miércoles se echó para atrás al declarar que la reforma eléctrica del Ejecutivo federal no pone en riesgo Va por México, la cual sigue construyendo acuerdos para ir en coalición a las elecciones locales en 2022 y después en 2024.

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Por primera vez disintió de la mayoría parlamentaria cuando afirmó que el tricolor no permitirá que Morena le ponga plazos para la discusión y votación de dicha iniciativa, luego de que el coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, el poblano Ignacio Mier, fijó el mes de diciembre como plazo máximo.

"La coalición Va por México la veo firme, la veo en el diálogo, la veo en la construcción de acuerdos, hay que cumplir nuestros compromisos que asumimos en nuestra coalición electoral y después en nuestra coalición legislativa. Luego los ánimos medio se calientan, pero al final del camino, lo vamos a hacer siempre pensando en el país", dijo.

Por su parte, el coordinador parlamentario del PAN, Jorge Romero, emplazó al PRI a no guardar silencio y definirse contra la reforma eléctrica propuesta por el presidente, porque no hacerlo pone en riesgo la alianza opositora.

Todo parece que los partidos acordaron bajar el tono de la discusión de la Reforma Eléctrica, aunque el presidente los presione un día sí y otro también en la mañanera. La iniciativa ya está en comisiones y se discutirá hasta noviembre, después de la aprobación del presupuesto.

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Pero mientras eso sucede, se encienden los focos ámbar en los estados, por ejemplo, en Puebla de romperse la alianza opositora saldrían afectados personajes como Eduardo Rivera, quien ha construido un vínculo estrecho con los priistas, pero para ser un candidato fuerte al gobierno en 2024 requiere de Acción Nacional, su partido, que es la segunda fuerza electoral en el estado.

Morena en Puebla necesita los votos de los priistas en el Congreso Local para aprobar la Reforma Eléctrica y si los consiguen, será un adelanto de las elecciones de 2024 donde podrían llevar a un morenista al gobierno del estado y a un priista por la presidencia municipal de la capital.

Las pasiones políticas están desatadas, los protagonistas saben todo lo que está en juego y por más que se parezcan, nunca será lo mismo para los priistas una alianza con Acción Nacional, sus adversarios históricos, que, con Morena, una derivación de su pasado nacionalista-revolucionario.

La moneda está en el aire.

De las anécdotas que se cuentan

Ahora que tanto se habla de las plataformas y las redes sociales luego de la caída de Facebook, Instagram y WhatsApp vale la pena recordar que en una de esas campanadas de genio que se dan de vez en cuando, el senador demócrata Richard Blumenthal comentó respecto a las redes sociales que “Facebook parece estar tomando una página del manual de la industria del tabaco y apunta a adolescentes con productos potencialmente peligrosos a la vez que oculta lo que dicen sus investigaciones”.

En unas cuantas palabras, el representante de Connecticut puso el dedo en la llaga, respecto a la capacidad para destruir y hacer siervo a una persona por parte del tabaco y empleó la analogía hacia la red social más influyente del planeta.

Sin embargo, Instagram, se hizo un autoanálisis y encontró datos perturbadores que poco a poco ha ido divulgando, por ejemplo: la mitad de los adolescentes que atendieron una encuesta hecha por esta red, mencionaron sentirse no atractivos tras ver lo que ahí se divulga.

Esto podría ser una mera ocurrencia adolescente, pero adonde las alarmas se encendieron fue en que alrededor del 40 por ciento de los encuestados señaló que su modo de vida era deprimente, una vez que habían ingresado a la red social.

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En otras palabras, la red social no está funcionando como un medio de diversión y de intercambio de cosas atractivas, sino como una especie de espejo que cuestiona a los adolescentes y les hace pensar en términos sumarios: hay millonarios… y los demás.

Por ejemplo, si a la primera celebridad local que siguen, le encuentran una colección de autos deportivos y una mesa atiborrada de champaña y mazos de dólares, los chicos se cuestionan si tiene sentido estudiar y vivir en una familia de clase media o baja.

No existe una solución que contente a todos los involucrados.

Lo único que sí se considera razonable es que Instagram y Facebook no sustituyen a los padres de familia. Si las redes sociales sustituyen a la autoridad y al afecto entre padres, hijos y hermanos, entonces estamos en problemas como sociedad.

fcrisanto00@yahoo.com.mx

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*BC