Promotores de la transformación, la base de la formación de una nueva clase política

El Instituto Mexicano para la Transformación (IMT) de la vida pública, es una asociación civil, integrada por mujeres y hombres libres, los promotores para la transformación, mexicanos que ejercen liderazgo y están comprometidos con su comunidad.

Ellos se han propuesto:

• Coadyuvar al desarrollo de la vida democrática y la cultura política de México, organizando a los ciudadanos para que participe activamente en la transformación positiva de la vida pública.

• Realizar tareas de investigación y análisis comunitario, elaborando estudios y programas para el desarrollo y progreso de la vida de los pueblos.

• Participar en la construcción de una sociedad libre, justa, solidaria, democrática y fraterna.

Los promotores para la transformación trabajan en la célula elemental de dicha organización, la comunidad. Ahí, en el corazón de la organización social, alientan la posibilidad de lograr el bienestar general, fundados en el trabajo colectivo, solidario y responsable.

La labor que desempeñan los promotores para la transformación, en las tareas de la organización comunitaria, les permitirán:

• Identificar los liderazgos naturales de los pueblos y comunidades

• Conocer y entender sus preocupaciones, sus problemas y necesidades, sus anhelos y sus sueños

• Alentar y encauzar los legítimos deseos de progreso y desarrollo de cada comunidad

Esa tarea, legitimará su propio liderazgo, un liderazgo que surge del trabajo realizado en el territorio, un liderazgo que surge de la identidad social, en el compromiso con la comunidad y en la responsabilidad con el bienestar colectivo. De manera natural, en la diaria tarea, el Instituto Mexicano para la Transformación irá detonando un Programa de Desarrollo Político.

De manera natural, en el correcto desempeño de las tareas encomendadas, en una ruta de metas y retos, de compromisos y cumplimiento, de voluntad y coraje, se construirá, de la mano de todas y todos, una nueva generación de hombres y mujeres, que surgen de la sensibilidad social y del compromiso solidario con las mejores causas de la comunidad.

Los hombres y mujeres que se integran como promotores para la transformación, serán entonces, la base de la formación de una nueva clase política, animada en los principios de la Cuarta Transformación, con un compromiso firme y definido con la justicia social, con los más pobres. Serán las mujeres y los hombres que dirigirán los destinos de sus pueblos, de sus regiones y de Puebla en los nuevos tiempos.

Estos cuadros selectos de nuestra organización, forjados en el trabajo comunitario, conocedores de los problemas y necesidades de los pueblos, de la potencialidad de las regiones, provocarán el desarrollo regional de todo el Estado de Puebla.

Programa de Desarrollo Regional

Con el pueblo todo, sin el pueblo nada. Sólo con el pueblo organizado se puede salvar a la nación.

Siendo un principio fundamental en la formación del promotor para la transformación, la democracia participativa, habrá de acudir al territorio, a convocar y reunir las comunidades, a escuchar y registrar, a organizar y proponer.

De una consulta general, que se lleve a efecto en la totalidad de las comunidades del estado, surgirá la propuesta popular que determinará la ruta a seguir para lograr un desarrollo regional equilibrado en todo el territorio estatal.

Para lograr sus objetivos, el IMT organizará foros de propuesta, locales, regionales y estatales, con la presencia de los especialistas, de los académicos, de los colegios de profesionistas, de las universidades y tecnológicos; de las organizaciones, los sindicatos y los partidos.

De todo ello habrá de surgir un Programa de Desarrollo Regional que dé respuesta a lo que Puebla quiere, un programa que surja de la entraña del pueblo, que será escuchado y atendido, con cuidado y con respeto.

El trabajo de organización que se realice, intenso, comprometido, responsable, permitirá que los nuevos tiempos lleguen a Puebla. Las tareas de consulta, los foros, los encuentros que se realicen, permitirán trazar la ruta correcta para un buen gobierno a la altura de las y los poblanos, un gobierno cuyas causas emanen de la deliberación comunitaria y las soluciones que proponga provengan de la sabiduría colectiva.

Este gran esfuerzo sin precedentes está encaminado a lograr la reconciliación y la prosperidad para Puebla donde todas las visiones sean consideradas y todos los esfuerzos sean aprovechados para devolver la esperanza a todas y todos los que sueñan con un estado transformado de oportunidades, de justicia y de prosperidad.