Fieles se congregan en Puebla para celebrar al Señor de las Maravillas pese a la lluvia
Por 1 Julio, 2025Puebla, Pue.– En una muestra de profunda devoción, cientos de creyentes católicos se reunieron desde la madrugada de este martes 1 de julio en el Templo de Santa Mónica, ubicado en el Centro Histórico de Puebla, para participar en la tradicional celebración dedicada al Señor de las Maravillas, una de las imágenes religiosas más veneradas en el estado.
Fieles hacen fila bajo la lluvia
Desde las primeras horas del día, los asistentes comenzaron a llegar al templo, portando sombrillas e impermeables debido a la lluvia intermitente. La fila de creyentes se extendió hasta la calle 16 Poniente, reflejando el fervor con el que los devotos acuden año con año a agradecer favores recibidos o presentar nuevas peticiones.
A pesar del mal clima, la fe se impuso al agua y al frío. Familias enteras aguardaron pacientemente su turno para ver de cerca la imagen religiosa. En medio del ambiente de recogimiento, algunos ofrecieron oraciones, otros entonaron cánticos y unos más depositaron flores como símbolo de gratitud.
Alimentos como parte de la tradición
En el marco de esta celebración religiosa, diversas familias organizaron la entrega de alimentos gratuitos como café, pan, tortas, chilaquiles y mole. Los puestos improvisados se adaptaron con lonas y estructuras sencillas para protegerse de la lluvia y continuar con el gesto solidario hacia los asistentes.
Una de las devotas, María Zúñiga, expresó que acudió al templo para agradecer la recuperación de salud de un familiar. Como parte de su promesa, llevó flores y manifestó que planea cumplir una manda personal en señal de agradecimiento por lo que considera un milagro concedido.
Una tradición que se repite cada año
La imagen del Señor de las Maravillas concentra a miles de fieles dos veces al año: durante el tercer viernes de Cuaresma y cada 1 de julio, día de gran significado espiritual para los creyentes poblanos. En ambas fechas, se genera una movilización masiva que transforma el entorno del templo en un centro de oración, esperanza y consuelo espiritual.
*ARD