Diagnóstico temprano y nuevas técnicas: claves para tratar quistes de ovario
Por 14 Enero, 2025Las masas anexiales, comúnmente conocidas como quistes de ovario, abarcan todas las tumoraciones que afectan a las trompas de Falopio o los ovarios, estas formaciones pueden ser asintomáticas y diagnosticarse durante revisiones ginecológicas de rutina, o manifestarse mediante síntomas inespecíficos como dolor abdominal, hinchazón, náuseas o sensación de plenitud, según explica el doctor Balbino Povedano, jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Quirónsalud Córdoba.
Prevalencia y riesgo de malignidad
Las masas anexiales son comunes en mujeres de todas las edades, aunque su prevalencia varía. En mujeres jóvenes no menopáusicas, se presentan en un 20-25% de los casos. En mujeres postmenopáusicas, aunque menos frecuentes (10%), existe un mayor riesgo de malignidad, señala la doctora María Dolores Torres, especialista en Ginecología del mismo centro.
Entre los principales factores de riesgo se encuentran la obesidad, antecedentes familiares de quistes o cáncer de ovario, ser madre mayor de 35 años, el tabaquismo y algunas afecciones genéticas.
Diagnóstico y pruebas de imagen
El diagnóstico suele realizarse mediante ecografía ginecológica, que permite determinar si un quiste es benigno, dudoso o posiblemente maligno. Si esta prueba resulta insuficiente, se recurre a técnicas como la resonancia magnética, con capacidad para caracterizar lesiones, o tomografías computarizadas (TAC) en casos específicos.
Tratamientos y avances quirúrgicos
El tratamiento depende de las características del quiste y su impacto en la salud. En casos emergentes, como quistes hemorrágicos, infecciones graves o masas sospechosas de malignidad, puede ser necesaria una intervención quirúrgica inmediata.
En situaciones de quistes benignos sintomáticos o mayores de 10 centímetros, se opta por técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas, como la laparoscopia o la cirugía robótica. Además, recientemente se ha introducido la técnica V-Notes, que permite la extracción de masas anexiales a través de la vía vaginal, evitando incisiones abdominales.
Cuando se sospecha un cáncer de ovario, el proceso incluye estudios de imagen, biopsias y análisis multidisciplinarios para definir una estrategia terapéutica. Según la doctora María Jesús Rubio, jefa de Oncología Médica de Quirónsalud Córdoba, hasta un 70% de los casos se diagnostican en estadios avanzados. Este retraso resalta la importancia del diagnóstico precoz para mejorar los resultados del tratamiento.
Con información de ABC
*ARD