Atropelló El Metro a la 4T

Atropelló El Metro a la 4T

Del reportero
Por Fernando A. Crisanto 16 Junio, 2021

La investigación. El domingo 13 de junio, el periódico estadounidense “The New York Times” publicó un extenso reportaje sobre el colapso de la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México, que acabó con la vida de 26 personas el pasado 3 de mayo.

“Por qué colapsó la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México” es el título del reportaje realizada por un grupo de periodistas, tanto de la corresponsalía en la capital mexicana como de reporteros que se dieron a la tarea de entrevistar a distintos especialistas en descarrilamientos de trenes.

La forma en que el equipo del periódico estadounidense se dedicó a preparar en tiempo récord la investigación, fue sencilla. Tomaron miles de fotografías de todos los ángulos posibles en la “zona cero” del accidente y enviaron paquetes con dichas fotos a los especialistas desperdigados en la Unión Americana.

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Adicional a la evidencia fotográfica, los periodistas entrevistaron a un sinnúmero de personas involucradas en la construcción de la obra, en el entendido que no divulgarían su identidad. Por otra parte, revisaron docenas de contratos vinculados a la construcción y supervisión de los trabajos realizados por distintos proveedores.

La conclusión general de todos los ingenieros consultados por NYT es que había una falla generalizada en la soldadura de la obra y literalmente, los pernos que sujetaban a distintas partes de la construcción, quedaron degollados.

Los especialistas que analizaron las fotografías coincidieron en algo que podría entenderse a la mexicana como “hacer la obra sobre las rodillas”, dada la presión y la velocidad por parte de las autoridades capitalinas para hacer la obra en tiempo récord.

A lo anterior, los periodistas mencionan un elemento que, si resultara auténtico, sería una mezquindad, que la obra hizo que ICA y la francesa Alstom se unieran con una puntual ignorante en los temas, pero que rebosaba liquidez para la construcción, Carso Infraestructura y Construcción, de Carlos Slim.

El tema es que no se recomendaba que la construcción se hiciera con enormes tramos de acero, pero Carso tiene distintas unidades de negocio que producen el metal, por lo que se torcieron las recomendaciones de ingeniería y se hizo una obra fuera de norma, por una cuestión de utilidad financiera.

Enrique Horcasitas, director del proyecto, traía mareados a los proveedores con la prisa y la amenaza de una multa cercana a 120 millones de dólares. Con todo, el periódico estadounidense reveló una omisión escandalosa, la obra inició sus trabajos, antes de que estuviera terminado el proyecto ejecutivo para construir, lo cual ya fue reconocido por Marcelo Ebrard en su respuesta de 15 páginas al diario.

Para decirlo en forma ejecutiva. La Línea 12 del Metro estaba construyéndose sin que quedara muy claro en el papel, qué era lo que había que construir, cómo hacerlo y encima, bajo una presión agresiva sobre los proveedores, tratando de cumplir una fecha límite irracional.

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En otras palabras, la ansiedad electorera de Ebrard se combinó con la búsqueda incesante de utilidades por parte de las unidades de negocio de Slim, generando una obra que tenía fecha de caducidad mortal, aunque nadie la sabía, el 3 de mayo de 2021.

La furia, como respuesta. Las reacciones a la investigación de “The New York Times” se dieron de manera inmediata por Claudia Sheinbaum, quien dejó atrás su acostumbrada frialdad y señaló en un tono estilo Nicolás Maduro que el trabajo del periódico extranjero era un atentado contra la 4T. Pocos le siguieron la ocurrencia de sus declaraciones.

Sheinbaum y sus operadores perdieron la mitad del territorio de la Ciudad de México en las elecciones del 6 de junio. Lejos de aceptar su derrota, la jefa de Gobierno soltó que todos menos ella, tenían la culpa del fracaso estrepitoso de la izquierda en la capital del país.

Si bien es cierto que podría pensarse que Sheinbaum hace un favor al defender a Ebrard de la investigación periodística, en realidad lo está haciendo por su propia sobrevivencia. La doctora en Física es lo suficientemente inteligente como para entender que la Línea 12 del Metro también le impactó de frente a su proyecto.

El planteamiento es sencillo, con la mitad de la Ciudad que gobierna en manos de la oposición, el escenario es adverso para 2024. Si sigue avanzando el escándalo de la Línea 12, habrá más investigaciones, más bajas y más ruido que suponen menor capacidad para que Morena haga lo que le plazca en la capital.

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Las votaciones del 6 de junio serrucharon al reducto central de la izquierda en este país y proviene del conector entre los pudientes y las clases humildes, las clases medias que han sido bocabajeadas incesantemente por Andrés Manuel López Obrador.

La racional es que, si las clases medias apuntalaron la victoria del presidente para llegar a Palacio Nacional, pueden trabajar en su contra.

Sheinbaum no está trabajando a favor de Ebrard, está pataleando para salvar su proyecto personal de sucesión presidencial para 2024. Ebrard está dañado severamente y ahora mismo, pocos apostarían por un próspero futuro político para el funcionario más competente de la administración federal.

Esto aún no termina.

Faltan los resultados de la empresa que contrató Sheinbaum para realizar el peritaje externo de la Línea 12, los que serán presentados hoy en una primera fase. Los expertos coinciden en que tal proveedor, DNV, no es una autoridad en el tema y señalan que fue contratada para bajarle plomo al escándalo. Ya se verá.

 

De las anécdotas que cuentan


Ya sin mayoría calificada en el Congreso federal, el presidente López Obrados insiste en reformas constitucionales, de las cuales anunció ayer tres.

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Fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad para que controle por lo menos el 54 por ciento del mercado; la renovación del Instituto Nacional Electoral para que los consejeros sean demócratas propuestos por él; y que la Guardia Nacional pase a manos de la Secretaría de la Defensa Nacional, como una rama militar para que no se pudra.

Ninguna de las tres propuestas convencerá a la clase media y pone muy alto el nivel para que la oposición le dé sus votos para conseguir la mayoría calificada.

Veremos.

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*AR