Francia inscribe el derecho al aborto en su Constitución, el primero en el mundo

Este lunes, Francia se convirtió en el primer país del mundo en incluir el derecho al aborto en su Constitución, luego de que, el Parlamento votó a favor de modificar la Constitución de 1958 para consagrar la “libertad garantizada” de las mujeres para abortar.

De acuerdo con las encuestas, cerca de 85 por ciento de la población apoya la reforma. Mientras que, antes de la votación, el primer ministro, Gabriel Attal, afirmó ante el Parlamento que el derecho al aborto seguía “en peligro” y “a merced de quienes toman las decisiones" y justificó el esfuerzo del gobierno para protegerlo.

Por lo que, el presidente Emmanuel Macron fue acusado de utilizar la Constitución con fines electorales, ya que los críticos afirman que la modificación no está mal, sino que es innecesaria y acusan a Macron de utilizar la causa para impulsar su credibilidad como político de izquierda.

Cabe resaltar que, en Francia el derecho al aborto está consagrado por ley desde 1975, y desde entonces la ley se actualizó nueve veces, para ampliar el acceso.

Aunado a lo anterior, el Consejo Constitucional francés, órgano que decide sobre la constitucionalidad de las leyes nunca ha puesto repartos.

Cabe resaltar que, en una sentencia de 2001, el consejo basó su aprobación de aborto en la noción de libertad consagrada en la Declaración de los Derechos del Hombre de 1789, que técnicamente es parte de la Constitución.

Sin embargo, muchos juristas aseguran que el aborto ya era un derecho constitucional.

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“Mi cuerpo mi decisión”, sobre la torre Eiffel

Aunado a lo anterior, el cambio constitucional en Francia fue impulsado por los recientes acontecimientos en Estados Unidos, donde el Tribunal Supremo suprimió el aborto como derecho en 2022 y lo dejó en manos de las legislaciones de cada estado, que vuelve a prohibir el procedimiento, siendo el final al derecho al aborto para millones de mujeres.

Sin embargo, la protección del derecho al aborto en la Constitución francesa fue bien recibida por muchos en el país.

"En el momento de la votación, la torre Eiffel debería brillar. Es un mensaje importante para el mundo", indicó Anne-Cécile Mailfert, activista de la Fondation des Femmes, organización de defensa de los derechos de la mujer.

Aunado a lo anterior, no todos han acogido con satisfacción la votación, "No puede haber 'derecho' a quitar una vida humana", afirmó el Vaticano a través de un comunicado, haciendo eco de las preocupaciones planteadas por obispos católicos franceses.

Con información de El Universal

*ARD