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97 mil niños perdieron a su padre a causa del Covid

32 niños se quedaron sin ambos tutores y a esto se suma la perdida de sus abuelos
Por Redacción 7 Agosto, 2021

El doctor en pedagogía por la UNAM, Pedro Daniel Martínez Sierra, de la Escuela Nacional de Trabajo Social, ENTS,  declaró que un estudio denominado The Lancet ha rebelado que a causa de la pandemia más de 33 mil niños mexicanos perdieron a su madre y 97 mil a su padre y la pandemia  aún no ha terminado.

A esto se suma que un millón y medio de pequeños también sobrellevan la ausencia de sus cuidadores secundarios, es decir, sus abuelos fallecidos, quienes los cuidaban en la ausencia de sus padres. En el mismo trabajo se indica que,  que en el caso de México, entre el 1 de marzo de 2020 y el 30 de abril del 2021, 32 niños se quedaron sin ambos tutores.

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 De  acuerdo al experto el problema se agrava por qué la pandemia sigue, y además de los problemas ya existentes que afectan a ese sector se suma el Covid. Este grupo pasa por situaciones  vinculadas a la discriminación y la invisibilización , un grupo que cuyos problemas se agravaron con este virus.

El tema de orfandad tiene severas afectaciones en el desarrollo de los niños debido a la falta de contacto físico de los padres que suele ser clave para el desarrollo físico, emocional, cognitivo, la confianza y la autoestima

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Los niños que pierden a sus cuidadores primarios tienen mayor riesgo de sufrir problemas de salud mental, violencia física, emocional o sexual, y no sólo se vuelven víctimas de la violencia, sino también en generadores de la misma. Estas experiencias adversas aumentan riesgos vinculados con suicidios, embarazo adolescente, enfermedades infecciosas y otros”, abundó Martínez Sierra.

A este problema se suma que uno de los derechos más vulnerados es el de la educación, ya que es lo primero que regularmente se sacrifica; empiezan a trabajar, suelen ocuparse no nada más de sí mismos sino de otros niños más pequeños y se vuelven cuidadores, particularmente las niñas.

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Asimismo, se vulneran otros derechos, por ejemplo, a la vivienda, pues los pequeños y jóvenes comienzan a incorporarse a actividades laborales degradantes, apuntó el investigador universitario.

El investigador  añadió que los trabajadores sociales son clave para iniciar a tomar decisiones; están en la primera línea de atención cuando las personas enferman y los familiares pueden acercarse a ellos y preguntar cómo enfrentar el problema con los pequeños.

*OC

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