Un aborto inseguro, es la tercera causa principal de muerte materna del mundo y dan lugar a cinco millones de discapacidades evitables

Para saber datos claves sobre el aborto hay que partir del significado de este, el cual es un procedimiento que interrumpe un embarazo, donde a través de medicinas o cirugías se retira al embrión o feto y placenta del útero, la cual es una necesidad básica de atención para mujeres y niñas.
Asimismo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) define al aborto inseguro como “un procedimiento para finalizar un embarazo no deseado realizado por personas que carecen de la capacidad necesaria o que se lleva a cabo en un entorno donde se carece de un estándar médico mínimo, o ambos”.
Sin embargo, pese a que una de cada cuatro embarazos acaba en aborto en el mundo, este procedimiento aún no es legal en todo el mundo, el riesgo sigue latente para quienes puedan necesitarlo y solicitarlo. Tema que con el tiempo ha tomado relevancia y controversia por los conservadores y aquellos que defienden la vida, aunque sea ajena y sobrepasando la individualidad de cada ser humano. Por lo que es importante informar y no envolvernos en las repercusiones de restringir el acceso a este servicio de salud básico.
Datos del aborto que deberías conocer
Hay que partir que los abortos pasan en todo el mundo, bajo la ley o sin ella, con asistencia médica o sin ella, lo que urge es que exista una asistencia médica y segura, ya que terminar con un embarazo es una decisión común, que toman millones de personas, pues el 25 por ciento de los embarazos acaban en aborto.
De acuerdo con el Instituto Guttmacher, la tasa de abortos es de 37 por mil personas en los países que prohíben el aborto totalmente o solo en caso de riesgo para la vida de la mujer y de 34 por mil personas en lo que lo permiten en general, diferencia que no es significativa estadísticamente.
Por qué es importante proveer un servicio médico capacitado y salubre
El aborto es uno de los procedimientos médicos que menos riesgos entraña, incluso menos que el parto, sin embargo, se requiere de un servicio de la salud capacitado y con las condiciones salubres adecuadas, sin embargo, el hecho de que el gobierno lo prohíba, obliga a las mujeres a recurrir a clínicas clandestinas.
Conclusión: Penalizar el aborto no lo erradicará ni lo impedirá, solo causará más muertes y que no sea seguro.
A nivel mundial, de acuerdo con la OMS todos los años se registran 22 millones de abortos inseguros, en su mayoría son de países en vías de desarrollo.
Un aborto inseguro, es la tercera causa principal de muerte materna del mundo y dan lugar a cinco millones de discapacidades evitables.
Legislación del aborto
Los países que restringen tal derecho, brindan “excepciones” como: un embarazo consensuado de una violación o de incesto, que involucre un caso de malformación grave y mortal del feto o que pongan en riegos la vida o salud de la mujer. Sin embargo, el porcentaje de abortos practicados por estos motivos, son mínimos.
Pobreza y marginación, otro problema
Las personas marginadas son severamente afectadas por la prohibición legal del aborto seguro, ya que no cuentan con los medios para un servicio legal, ni pueden viajar para solicitar una interrupción de embarazo seguro a otro país.
Minorías
Entre ellas figuran las mujeres y las niñas con bajos ingresos, la refugiadas y migrantes, las adolescentes, las lesbianas, las mujeres cisgénero bisexuales, las personas transgénero o de género no conforme y las mujeres pertenecientes a minorías o indígenas.
Un paso de combate
Aunado a lo anterior, se busca que los estados garanticen el acceso a una educación sexual, a métodos anticonceptivos eficaces, abortos legales y sin riesgos y recibir atención temprana en casos de complicaciones.
Modificar legislación para tener acceso al aborto
En los últimos 25 años, más de 50 países han modificado su legislación para permitir mayor acceso al aborto, en ocasiones reconociendo que el acceso al aborto sin riesgos es fundamental para la protección de la vida y la salud de las mujeres. Irlanda se sumó a esa lista el 25 de mayo de 2018 tras un ansiado referéndum en el que la población votó abrumadoramente a favor de anular la prohibición casi total del aborto que establecía la Constitución.
Está el aborto legal sin restricciones se realiza en: Europa: Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, España, Francia, Italia, Irlanda, Noruega, Países Bajos, Portugal, República Checa, Suecia, Suiza, Albania, Azerbaiyán, Bielorrusia, Bosnia y Herzegovina, Bulgaria, Croacia, Eslovaquia, Estonia, Georgia, Grecia, Hungría, Letonia, Lituania, República de Macedonia, Moldavia, Montenegro, Rumania, Rusia, Serbia, Turquía y Ucrania.
En América en: Uruguay, Estados Unidos, Cuba, Canadá, Barbados, Belice, Guyana y Puerto Rico. En Asia en: Baréin, Camboya, China, Kazajistán, Kirguistán, Nepal, Singapur, Turkmenistán y Uzbekistán. En Oceanía en: Australia.
El aborto permitido solo para salvar la vida de la mujer. Es inducido, solo se lo permite cuando la vida de la mujer se ve en peligro y en algunos casos, cuando ocurre una violación en América: Brasil, Chile, Guatemala, Dominica, México, Panamá, Paraguay, Venezuela, Argentina, Bahamas, Bolivia, Costa Rica, Ecuador, Granada, Perú, Jamaica, Colombia, Antigua y Barbuda.
México en proceso de la despenalización del aborto: En nuestro país, la Ciudad de México y Oaxaca son las únicas entidades donde las mujeres pueden abortar hasta las 12 semanas de gestación de manera legal sin importar la causa, pero en otros lugares el camino a la despenalización es más estrecho. Actualmente, Puebla es otro estado que tiene el aborto legal en su agenda, sin embargo, organizaciones, funcionarios públicos e Iglesia no han reparado en manifestar su descontento, basado en desinformación y creencias de proteger la “vida” de otro ser, que no le pertenece.
En Puebla, organizaciones como: Voces Unidad por la Vida, Alianza Nacional de Padres de Familia, Unión de Padres de Familia de Puebla, y Defendemos la Vida #Nacer es mi derecho, se han pronunciado en contra de la legalización del aborto, al igual que el arzobispo, Víctor Sánchez Espinosa, quien hace unos días señaló que quién decide abortar debería ser considerado “sicario”. Por lo que esté tema aún sigue siendo causa de controversia y negación.
La mayoría de los países que se encuentran en África, Asia y Oceanía, también tienen esta legislación a excepción de Egipto, Kenia, Malawi, Honduras, Corea del Sur, Emiratos Árabes Unidos, Irak, Kuwait, Maldivas, Mongolia, Siria, Nauru y las Islas Salomón, donde aún se encuentra restringido, siendo legal, pero sujeto a algunas restricciones.
El aborto solo para proteger la salud mental y física de la mujer en: Paraguay, Argentina, Bahamas, Bolivia, Costa Rica, Ecuador, Granada, Perú, Colombia, Barbados, México, Panamá, India, Jordania, Pakistán, Singapur, Tailandia, Vietnam, Samoa, Nueva Zelanda, Burkina Faso, Burundi, Camerún, Comoras, Etiopía, Ghana, Guinea, Liberia, Marruecos, Nigeria, Ruanda, Sierra Leona, Tanzania, Uganda, Zimbabue y Zambia.
Abortos por razones socioeconómicas. Es una práctica que la apropiaron solo los países de Belice, Chipre, Taiwán, India, Zambia, Portugal, Cabo Verde, Japón, Finlandia, Islandia, y el Reino Unido, solo permitiendo la interrupción del embarazo, por razones socioeconómicas.
El aborto ilegal sin excepciones. Es cuando el aborto no está permitido bajo ningún concepto en: República Dominicana, El Salvador, Haití, Honduras, Nicaragua, Andorra, San Marino, Surinam y Malta.
Obstáculos para el aborto
En los estados con acceso a servicios legales también tienen múltiples restricciones y obstáculos para acceder a ellos, como el precio, la imparcialidad en el asesoramiento, plazos obligatorios de espera.
La penalización del aborto y las leyes sobre él restrictivas impiden a los proveedores de servicios de salud hacer bien su trabajo y prestar la mejor atención posible a sus pacientes.
De acuerdo con amnesty, la penalización del aborto tiene un "efecto disuasorio", que puede hacer que los profesionales médicos no comprendan los límites de la ley o apliquen las restricciones de manera más estricta de lo dispuesto en ella. Puede deberse a varios factores, como las convicciones personales, el estigma sobre al aborto, los estereotipos negativos sobre las mujeres y las niñas o el temor a incurrir en responsabilidad penal.
Los defensores y defensoras de los derechos sexuales y reproductivos y los activistas y las activistas de los derechos LGBTI hacen campaña para sensibilizar sobre esta cuestión y conseguir que los servicios de aborto sean accesibles e inclusivos para todas las personas que los necesiten sin discriminación por ningún motivo.
En primer lugar, la negación de servicios médicos, incluidos los servicios de salud reproductiva que sólo determinadas personas necesitan, es una forma de discriminación.
El comité que vigila el cumplimiento de la Convención de la ONU sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW o Tratado de los Derechos de las Mujeres) ha manifestado constantemente que las leyes sobre el aborto restrictivas constituyen discriminación contra las mujeres. Esta afirmación es aplicable a todas las mujeres y todas las personas que puedan quedarse embarazadas, pues el Comité de la CEDAW ha confirmado que las salvaguardias de la Convención y las obligaciones de los Estados conexas se aplican a todas las mujeres e incluyen, por tanto, la discriminación contra las mujeres que son lesbianas, bisexuales y/o transgénero, especialmente si se tienen en cuenta las formas específicas de discriminación que sufren.
En segundo lugar, el estigma en torno al aborto y los estereotipos de género están estrechamente relacionados con la penalización del aborto y otras leyes políticas restrictivas sobre el aborto.
La mera percepción de que el aborto es ilegal o inmoral da lugar a que el personal de los servicios de salud, sus familiares y los jueces, entre otros, estigmaticen a las mujeres y las niñas. Como consecuencia de ello, las que solicitan servicios de aborto corren el riesgo de sufrir discriminación y hostigamiento.
Por último, hay que recalcar que el acceso a un aborto sin riesgos, es cuestión de derechos humanos, pues toda persona tiene derecho a la vida, a la salud y a no sufrir violencia, discriminación ni tortura y tratos crueles, pues no está de más recalcar que las decisiones sobre nuestro cuerpo SON SOLO NUESTRAS, por simple “autonomía física”.
Pues este derecho está ligado a la protección y al respeto de los derechos humanos de las mujeres, niñas y demás personas. Asimismo, se liga a la libertad de ejercer el DERECHO a decidir sobre su vida reproductiva, que incluye la decisión de tener o no hijos y cuándo, donde la opinión de otros no debería ser válida.
*AR